Cada mate cocido. Cada pan caliente. Cada café humeante. Y cada guiso de lenteja. Todas esas demostraciones de apoyo y cariño fueron recibidas por cada bombero y por cada bombera como un cálido abrazo entre miembros de una misma comunidad.
Aquellos que son más felices son los que hacen más por otros.
Gracias vecinos. Gracias vecinas.
Sus Bomberos Voluntarios
Difusión y Prensa BVAvellaneda



